Una niña de 13 años que ha estado hospitalizada con COVID-19 por tres semanas perdió una de sus extremidades debido a las complicaciones de salud que la enfermedad le ha causado.
Los doctores que atiendan a Alina Valenzuela en un hospital de Houston, Texas, encontraron que ella tenía un coágulo de sangre en su pierna derecha.
“Por el estado crítico en el que estaba Alina, no pudieron hacerle cirugía o darle medicamentos y la única opción fue amputarle la pierna”, explicó Miriam Treviño, tía de la menor.
No obstante, la niña ha demostrado ser toda una guerrera, pues ella también sobrevivió a un paro cardíaco como resultado de las complicaciones por el nuevo coronavirus.
“Ella está aquí con nosotros y eso es lo más importante”, dijo Treviño. “Alina es una niña muy valiente y muy fuerte y con unas ganas de vivir tremendas”.